Entrevista a Simón Karmann

De Lorena a Perillo. Entrevista a Simón Karmann, lector de francés no noso centro.

Por André Araujo Tavares

“Hay muy buen trato en el Neira Vilas”

Andre Araujo y Somon Karmann
Andre Araujo y Somon Karmann

Simon Karmann nació en el año 1991 en Sarreguemines, en Lorena (Francia) y es filólogo. Su tesis doctoral trata sobre el fútbol en España. Ha tenido de siempre interés por las lenguas y en especial en el idioma español que ha estudiado desde hace varios años con estancia en España

Entrevista

¿Qué fue lo que más le llamó la atención del IES Neira Vilas?

En primer lugar me encantó el edificio. Es maravilloso su ubicación y las vista al mar. Los profesores tienen muy buena relación entre ellos.

¿Y el método de trabajo?

Me gusta porque hay mucha comunicación entre padres y profesores. Considero que se trabaja mucho con los alumnos y hay muy buen trato; en Francia hay mucha más distancia y menos comunicación personal.

¿Cómo ha visto los progresos del alumnado?

Considero que se hacen muchas actividades y eso es muy motivador. En concreto en las clases de francés el salir fuera, las visitas y los intercambios les hacen ver la necesidad y la utilidad de los idiomas. Las otras clases, al ser plurilingües, también les obliga a usar la lengua en diferentes contextos. La propuesta de actividades se entiende como un premio. El nivel del alumnado de francés es muy alto.

¿Y los intercambios?

Hay mucho interés y participación. Está todo muy bien organizado. Es una buena manera de aprender fuera del Centro educativo.

¿Alguna sugerencia?

Quizás que sean siempre a Bretaña.

¿Cree que es importante el francés?

Claro, es fundamental que se favorezca. En Francia se está perdiendo el alemán en mi región, Lorena por no haber interés en otras lenguas.

¿Ha sido útil la estancia aquí?

Ha sido fundamental porque para ser profesor la mejor manera es la práctica guiada por quien tiene una gran experiencia.

¿Qué es lo que más le gusta y lo que menos de A Coruña?

El mar y el ambiente y lo acogedora que es la gente. Lo que menos la arquitectura y el poco interés por conservarla.

¿Y de Galicia?

Me gusta mucho porque tiene una cultura propia y un paisaje muy diferente de lo que conocía. Creo que aprendí muchas cosas aquí.